Una visita a San Marino combina cultura, naturaleza y placer de una forma única y convierte su estancia en una experiencia inolvidable. Lo más destacado es la visita a las tres torres de defensa, Guaita, Cesta y Montale, que se alzan majestuosas sobre la ciudad. Estos edificios históricos no sólo son un hito importante, sino que también ofrecen unas vistas espectaculares de los alrededores y una fascinante visión de la historia. El casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2008, está rodeado de murallas medievales y es un punto de partida ideal para conocer la historia y el encanto de la república más antigua del mundo. El Museo Estatal exhibe una impresionante colección de objetos históricos y hallazgos arqueológicos. Quienes busquen algo especial pueden visitar el museo de cera o el museo de vampiros . La Basílica de San Marino, la Iglesia de San Francisco con su museo anexo y el Palazzo Pubblico, el ayuntamiento histórico, son otros importantes puntos de interés cultural y arquitectónico.
El entorno natural del Monte Titano es ideal para largas caminatas . Los senderos en buen estado permiten disfrutar del pintoresco paisaje y experimentar la tranquilidad de la naturaleza al mismo tiempo. Los fotógrafos encontrarán numerosas oportunidades para captar la belleza de la región. La webcam de la estación de montaña del teleférico le muestra la impresionante vista de los alrededores de San Marino desde una altura de 686 metros. Una excursión por la Costa dell'Arnella, que se extiende hasta el mar Adriático, también ofrece impresionantes panorámicas.