Stuben es uno de los puntos neurálgicos del turismo de invierno en Austria, y la región de Arlberg, con sus amplias zonas de esquí, pistas de esquí de fondo, pistas de trineo, rutas de senderismo invernal y rutas de freeride, merece sin duda una visita. Desde Stuben, el teleférico de Albona lleva a la estación de montaña del primer tramo, un maravilloso descenso lleva a Alpe Rauz y otros remontes suben a Zürs am Arlberg. En conjunto, las estaciones de esquí del Arlberg cuentan con unos 300 kilómetros de pistas de todos los niveles de dificultad; entre las mejores se encuentran Lech, Zürs, St. Anton, Warth, Schröcken, St. Christoph y Stuben. En el Arlberg hay parques de atracciones, pistas de nieve profunda en terreno abierto, pistas de prácticas para niños y mucho más. Eche un vistazo al famoso dominio esquiable del Arlberg con las webcams y disfrute del impresionante panorama.
La pista de esquí de fondo de gran altitud de Lech es un punto culminante para los esquiadores de fondo, donde se puede esquiar hasta bien entrada la primavera. El tranquilo pueblo de Stuben es un poco más tranquilo que la zona de esquí. Los hoteles y alojamientos ofrecen una amplia gama de programas de bienestar y relajación y miman a sus huéspedes con una oferta culinaria de primera clase. Las pistas de las zonas de esquí pueden estar perfectamente preparadas de diciembre a abril, por lo que nada se opone a una larga temporada de esquí en el Arlberg.
El Anillo Blanco es una legendaria ruta de esquí en el Arlberg, con 22 kilómetros y más de 5.000 metros de altitud alrededor del Omeshorn. Entre descenso y descenso, podrá relajarse en los seis remontes y disfrutar de las vistas de las montañas del dominio esquiable. Las pistas del circuito son de dificultad fácil a moderada y pueden interrumpirse para descansar en los miradores del Rüfikopf y el Madloch. Una experiencia única es participar en la "Carrera del Anillo Blanco" en la ruta que pasa por Zürs y Zug am Arlberg. Desde la temporada de invierno 2005/06 se organiza en el Anillo Blanco la carrera de esquí más larga del mundo. Más de 1.000 corredores de varios países participan cada año en este espectáculo. El tiempo récord es de algo menos de 45 minutos, pero los esquiadores normales deben prever al menos 2 horas para recorrer el hermoso circuito de 22 kilómetros de longitud.