Schwangau es un auténtico imán turístico, sobre todo gracias a sus magníficos castillos reales. El castillo de Neuschwanstein, que sirve de inspiración para muchos cuentos de hadas, atrae cada día a numerosos visitantes. Los visitantes pueden admirar las majestuosas torres y la arquitectura de cuento de hadas del castillo. Justo al lado se encuentra el castillo de Hohenschwangau, que sirvió de residencia a la familia real bávara. A ambos castillos se puede llegar por rutas de senderismo bien señalizadas, con una ruta popular que lleva al puente Marienbrücke, desde donde se tiene una vista espectacular del castillo de Neuschwanstein.
Para los ciclistas, Schwangau ofrece senderos bien desarrollados que bordean los lagos y atraviesan el paisaje montañoso de Allgäu. Un recorrido por el Alpsee es especialmente bello, con sus aguas cristalinas que invitan a detenerse. En los meses de verano, el lago también ofrece la oportunidad de nadar y navegar.
La subida al Tegelberg también merece la pena: además de una magnífica vista, aquí le esperan numerosas rutas de senderismo, una pista de trineo en verano y la oportunidad de volar en parapente. El teleférico del Tegelberg le llevará cómodamente hasta la cima del Tegelberg, desde donde tendrá una fantástica vista de todo Allgäu y los Alpes bávaros. A través de la cámara en directo de Schwangau podrá contemplar el pintoresco paisaje y el ajetreo en torno a los castillos reales.